MI CONFRONTACIÓN CON LA DOCENCIA
Inicié como docente en uno de los Conalep de la ciudad de Veracruz, desde hace ya varios años, al principio sentía que no era un trabajo “ para toda la vida “ porque lo combinaba con algo de mi carrera, pero las circunstancias me han llevado a dar clases hasta en la Universidad y me siento muy bien con que ahora me reconozcan como MAESTRA.
¿Qué siento de ser profesora ? una gran responsabilidad; hoy en día debo de ser lo suficientemente consciente de las necesidades actuales de mis muchachos, que no son iguales que cuando inicié; ahora están más cerca de la información pero no “aterrizan mucho“, les encanta investigar ( que para ellos es encontrar, copiar y pegar ); discuten mucho pero sin sustentar; son tremendamente inquietos e inquisitivos, tímidos e introvertidos unos y exageradamente extrovertidos otros, tiene las ventajas de tener casi todo a la mano y eso también los hace dependientes de la tecnología, poco comprometidos en ocasiones pero si son motivados en la forma correcta, capaces de transformar algo completamente.
Actualmente trabajo en Puebla, y aunque los contextos socioculturales son distintos, los jóvenes son y serán siempre los mismos; llenos de sueños, imaginación, dudas y energía. El hecho de trabajar y ser parte de la vida de los alumnos es muy importante, me ha hecho más consiente, más cuidadosa, más detallista en muchos sentidos. Tengo ya muchos ex-alumnos que ahora son colegas y al reunirnos , me hacen sentir muy bien sus comentarios y el hecho de que me recuerden con cariño. Eso no lo paga nadie.
Pero definitivamente no todo es “ color de rosa”, han habido y hay situaciones que no acabo de comprender, como el hecho de que compañeros que tiene la misma responsabilidad, simplemente “se la pasan bien”, no cooperan con las nuevas disposiciones o simplemente ya no se involucran con la docencia; que buscan sacar provecho de sus clases o que impongan calificaciones en base a “ juegos ,cartas o viajes “; casos en los que aun contando con ayuda profesional, no se ha podido rescatar a algunos muchachos o en ocasiones que me digan: “ eso que quieres, no se puede” , simplemente.
Pero creo también que cada uno es responsable y tiene la capacidad para transformar el espacio educativo en el que participa, que podemos cada día aportar algo bueno , no sólo a nuestros alumnos sino también al país, que debemos involucrarnos para día a día tratar de alcanzar los objetivos de la RBT que se establecen conjuntamente con la Reforma Integral de la Educación Media Superior en la búsqueda de la mejora continua.
Inicié como docente en uno de los Conalep de la ciudad de Veracruz, desde hace ya varios años, al principio sentía que no era un trabajo “ para toda la vida “ porque lo combinaba con algo de mi carrera, pero las circunstancias me han llevado a dar clases hasta en la Universidad y me siento muy bien con que ahora me reconozcan como MAESTRA.
¿Qué siento de ser profesora ? una gran responsabilidad; hoy en día debo de ser lo suficientemente consciente de las necesidades actuales de mis muchachos, que no son iguales que cuando inicié; ahora están más cerca de la información pero no “aterrizan mucho“, les encanta investigar ( que para ellos es encontrar, copiar y pegar ); discuten mucho pero sin sustentar; son tremendamente inquietos e inquisitivos, tímidos e introvertidos unos y exageradamente extrovertidos otros, tiene las ventajas de tener casi todo a la mano y eso también los hace dependientes de la tecnología, poco comprometidos en ocasiones pero si son motivados en la forma correcta, capaces de transformar algo completamente.
Actualmente trabajo en Puebla, y aunque los contextos socioculturales son distintos, los jóvenes son y serán siempre los mismos; llenos de sueños, imaginación, dudas y energía. El hecho de trabajar y ser parte de la vida de los alumnos es muy importante, me ha hecho más consiente, más cuidadosa, más detallista en muchos sentidos. Tengo ya muchos ex-alumnos que ahora son colegas y al reunirnos , me hacen sentir muy bien sus comentarios y el hecho de que me recuerden con cariño. Eso no lo paga nadie.
Pero definitivamente no todo es “ color de rosa”, han habido y hay situaciones que no acabo de comprender, como el hecho de que compañeros que tiene la misma responsabilidad, simplemente “se la pasan bien”, no cooperan con las nuevas disposiciones o simplemente ya no se involucran con la docencia; que buscan sacar provecho de sus clases o que impongan calificaciones en base a “ juegos ,cartas o viajes “; casos en los que aun contando con ayuda profesional, no se ha podido rescatar a algunos muchachos o en ocasiones que me digan: “ eso que quieres, no se puede” , simplemente.
Pero creo también que cada uno es responsable y tiene la capacidad para transformar el espacio educativo en el que participa, que podemos cada día aportar algo bueno , no sólo a nuestros alumnos sino también al país, que debemos involucrarnos para día a día tratar de alcanzar los objetivos de la RBT que se establecen conjuntamente con la Reforma Integral de la Educación Media Superior en la búsqueda de la mejora continua.